Tabaco y cine, el glamour que se esfuma
«Películas libres de humo: Evidencia para la acción»
La OMS hace público su informe «Películas libres de humo: Evidencia para la acción» (Smoke-free movies: from evidence to action). En este se pide a los gobiernos que se evalúen las películas que representan el consumo de tabaco en un intento por evitar que los niños y adolescentes comiencen a fumar cigarrillos y el uso de otras formas de tabaco. No hace demasiado tiempo era frecuente que personajes entrevistados y entrevistadores en la televisión, actores y actrices, modelos y diseñadores, aparecieran en escena o en la pasarela fumando. ¿Casualidad? No. No era casualidad, como no lo sigue siendo ahora. La industria del cine ha sido utilizada por otra todavía más poderosa industria: la del tabaco.
¿Casualidad? No. No era casualidad y tampoco lo sigue siendo ahora. La industria del cine ha sido utilizada por otra industria más poderosa: la del tabaco.
El mundo del cine es el ámbito perfecto para recrear una falsa imagen de fumadores y fumadoras: mujeres seductoras, jóvenes decididos, hombres atractivos, personas independientes, intelectuales, triunfadoras… Personas que tienen una relación muy especial con el tabaco, que en teoría les conduce y confirma en su status. La difusión de ese mensaje hacia el público tiene un único objetivo, y no por exigencia del guión: que se se fume.
No es casualidad que paquetes de tabaco y actores fumando aparezcan en las películas. Documentos hechos públicos gracias a los juicios contra las tabaqueras incluyen contratos con determinados estudios cinematográficos y actores, tanto debido al consumo de tabaco en las películas o para que en ellas aparezcan anuncios, paquetes, logotipos y otros elementos publicitarios de las marcas de tabaco. En el año 2014 se estimó que en los Estados Unidos la exposición a escenas de fumadores reclutaría a más de 6 millones de nuevos fumadores jóvenes de entre la población infantil, de los cuales 2 millones acabarían muriendo de enfermedades inducidas por el tabaco. Y la autoridad sanitaria norteamericana informó que las calificaciones para adultos en las futuras películas con escenas de fumar podrían reducir las tasas de tabaquismo entre los jóvenes en casi una quinta parte y así evitar 1 millón de muertes relacionadas con el tabaco entre los niños y adolescentes de hoy en día.
A través de encuestas europeas se ha demostrado que se encuentran imágenes de tabaco en las películas más taquilleras producidas en seis países europeos (Alemania, Islandia, Italia, Polonia, los Países Bajos y el Reino Unido). El año 2003, el Día Mundial sin Tabaco auspiciado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) tuvo como tema “Cine y moda sin tabaco”. Trece años después se ha acumulado suficiente evidencia científica para afirmar que la industria del tabaco actúa como vector en la difusión del tabaquismo. Toda esta evidencia se ha acumulado en un Informe de la OMS, presentado por primera vez el año 2009, del que acaba de publicarse su tercera revisión actualizada.
Las medidas recomendadas incluidas en el Informe “Películas sin tabaco: de la evidencia a la acción” (descargable en castellano aquí) de la OMS:
- Certificar en los créditos de las películas si los productores de cine reciben o no, y en qué medida, algo de valor a cambio de usar o exhibir productos de tabaco en una película.
- Poner fin a la visualización de marcas de tabaco en las películas.
- Requerir anuncios impactantes contra el tabaco al inicio de aquellas películas que contengan imágenes de tabaco, ya sea en cines, televisiones, internet, etc.
- Requerir calificaciones por edad en aquellas películas con imágenes de tabaco para reducir la exposición general de los jóvenes a las imágenes de tabaco.
- Excluir de las subvenciones públicas aquellas producciones que promuevan el tabaquismo.
